“No podemos gestionar lo que no podemos medir”

Un panel que tuvo lugar el pasado viernes 11 de noviembre, reunió a Sudáfrica, República Dominicana y Brasil para debatir las cuestiones del género de forma justa e inclusiva en las próximas NDC.

Por: Teresa Xavier

Traducción: Wendy Toro

Esta frase, pronunciada por el moderador del evento oficial sobre cómo integrar la cuestión de género de forma justa e inclusiva en las próximas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC’s por sus siglas en inglés) y Estrategias de Desarrollo a Largo Plazo con Bajas Emisiones (LT LEDS): “Cómo integrar estrategias de transición justas e inclusivas en materia de género en la próxima generación de NDCs y LT LEDS” fue una de las que más me llamó la atención.

El panel contó con representantes de tres países: Sudáfrica, República Dominicana y Brasil, representados por Flávia Bellaguarda, abogada fundadora de las redes LACLIMA y Youth Climate Leaders (YCL) y una de las referencias brasileñas en materia de Justicia Climática. El objetivo del evento fue reflexionar sobre la actual NDC de cada uno de los países, compartir iniciativas que buscan incluir la agenda de género en este importante documento y las expectativas para las futuras NDC.

Lo que me llamó la atención durante el evento fue la sinceridad de Flávia al criticar la NDC de Brasil, que comenta muy superficialmente la agenda de género en su contenido, siendo mencionada sólo una vez.

Es evidente que hay un vacío en este tema que tiene espacio para ampliarse y relacionarse con otras áreas e indicadores ya planteados en la NDC, dado que es una agenda transversal a varias otras.

Y es precisamente esta palabra, “indicadores”, la que conecta la frase del principio del texto con la conversación del evento. Necesitamos entender la(s) realidad(es) que tenemos en Brasil, en lo que respecta a la equidad de género y a la justicia climática, para tener un diagnóstico inicial de este desafío, con el fin de establecer metas (indicando hacia dónde queremos ir) e indicadores para ser monitoreados en ese rango.

En este proceso de diagnóstico, es fundamental incluir las voces de las personas que más sufren en este tema y llevarlas a los espacios de discusión y decisión. Estas voces aportan la verdadera perspectiva de diversidad y complejidad de la vida cotidiana, que quienes no son impactados a veces no pueden ver. Sólo con un diagnóstico coherente con la realidad se puede dibujar un horizonte de objetivo ambicioso pero alcanzable.

A pesar de toda la importancia de los datos y los parámetros (ya que constituyen la base de la planificación), no bastan por sí solos. Al igual que los objetivos por sí solos tampoco son suficientes. Es imprescindible contemplar los dos puntos (presente y futuro) y trazar un camino que los conecte con acciones de seguimiento.

La sugerencia de Bellaguarda es dividir los objetivos más grandes en objetivos más pequeños que puedan ser monitoreados mensualmente, para asegurar: un progreso constante, una mejor comprensión de la acción local y también para identificar cuáles de los objetivos más pequeños no están avanzando más fácilmente y con anticipación.

Al final, vimos que tenemos todos los ingredientes necesarios para hacer avanzar esta agenda. Hemos llegado a un punto en el que ya no podemos poner excusas. Esta es la COP de la implementación, ¡el momento de poner manos a la obra y hacer despegar nuestros planes y ambiciones es ahora!

Gracias por leer hasta aquí🥰

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