Relato de una Huelga Sexual
Por: José Jara (Argentina)
A lo largo de la historia, los relatos y experiencias de grandes mujeres han sido sesgados por quienes los escribieron -casi siempre hombres- y su manera de contarlos. Sin embargo existen grandes y curiosos relatos de lucha y compromiso de la mujer por su género que, al día de hoy, son conmemoradas. Un claro ejemplo son las mujeres que marcharon en plena revolución francesa para lograr incorporar el sufragio femenino dentro la libertad, igualdad y fraternidad que se reclamaba para tal situación.
Pareciera que la cuestión de lucha por igualdad de género es algo propio de las edades moderna y contemporánea; sin embargo es una problemática que tiene tantos años como nuestra propia historia universal.
Remontémonos a un curioso relato en plena Guerra del Peloponeso en la Antigua Grecia (431 al 404 A.C.) que enfrentó a Esparta y Atenas. Ambos ejércitos estuvieron conformados en su totalidad por hombres guerreros que, en su deber, defendían a la patria dando su vida. Quienes debían resguardar la ciudad mientras el ejército estaba en guerra eran las mujeres. Inclusive era la Reina quien gobernaba en ausencia del Rey.
Luego tantos años de guerra la paz parecía muy lejana para ambas partes. Es así que un comediante griego, Aristófanes, escribió una obra literaria describiendo una situación utópica sobre cómo acabar con la guerra sin la necesidad de llevar a cabo la violencia. En su obra, una mujer llamada Lisistrata tuvo una gran idea de cómo acabar la guerra: organizar una huelga sexual. Para ello reunió a las mujeres referentes de toda la Grecia y las invitó a participar.
En este caso, lejos de ver a la mujer en un rol pasivo en plena sociedad griega, lo que propuso Aristófanes fue demostrar el poder real de las mujeres y las injusticias sociales proporcionadas en la mayoría de los casos por el hombre. Cuesta pensar cómo casi 2.500 años después de este relato la lucha por la igualdad sigue.
Hoy 8 de Marzo conmemoramos a aquellas mujeres que lucharon y siguen luchando por sus derechos y trabajan para ello día a día.
Ahora es el momento: las activistas rurales y urbanas transforman la vida de las mujeres (Naciones Unidas, 2018)