La Eco-innovación: características de una oportunidad para América Latina

Por Florencia Linarez (Argentina)

Este artículo fue originalmente publicado en Grupo Ciencia 21. Agradecemos la oportunidad de replicarlo.

Las Revoluciones Industriales de entre los siglo XVIII y XIX, marcaron un antes y un después en la producción de bienes y servicios, como así también en los patrones de consumo. La introducción de maquinarias permitió un aumento exponencial de la producción y una reducción de costos. Así, las personas comenzaron a tener oportunidad de acceder a bienes que antes eran solo reservados para algunas minorías. Luego, siguió la Tercer Revolución Industrial, que se caracterizó por los avances en electrónica e informática, especialmente por las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC). Actualmente estamos transitando la Cuarta Revolución Industrial, donde las Tecnologías de la Información Sensórica y la Robótica replantean el Internet tradicional e insertan aún más cambios en la automatización de algunas industrias (Román, 2016).

Estas revoluciones fueron claves para el progreso del ser humano, ya que hubo innovaciones que mejoraron las condiciones de vida, higiene y sanidad alrededor del globo. En el marco de la globalización, todos los procesos innovadores se vieron acelerados e incrementados principalmente debido a las ya mencionadas TIC.

No obstante los beneficios, las revoluciones industriales instalaron un sistema de producción y un patrón de consumo que ignoran las externalidades ambientales negativas, ya que se basan en una economía lineal donde se produce, se usa y se desecha. La explotación de combustibles fósiles, principales insumos en la producción industrial, ha sido una de las mayores causantes del cambio climático. En la actualidad se sabe que la explotación de recursos naturales no puede continuar, la explotación de combustibles fósiles debe disminuirse y aumentar la eficiencia en el uso de estos para poder reducir los Gases de Efecto Invernadero (GEI) que generan aceleramiento en el cambio climático.

Esta concepción se contrapone con el desarrollo sostenible, definido como “la satisfacción de las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades” (Naciones Unidas, 1987, p. 59) convirtiéndose en un desafío para las economías que ahora deben reformular sus patrones de inversión y sistemas de producción.

En marco de la cuarta revolución industrial, la más compleja que enfrentamos en nuestra historia como humanidad debido a que las tecnologías de información convergen con la sensórica y la robótica, se abre una oportunidad para iniciar la transición hacia un mundo sostenible, por lo cual surgen diversos tipos de innovaciones (Román, 2016). El tipo de innovación que consideramos clave y transversal en este trabajo es la Eco-innovación, definida como: “La Eco-innovación es cualquier innovación que reduce el uso de los recursos naturales,y disminuye la liberación de sustancias nocivas en todo el ciclo de vida de un producto (bien o servicio)” (Eco-Innovation Observatory, 2011, p. 1). En el presente trabajo, por fines prácticos, se hará referencia solo a Eco-innovación en bienes.

Lo interesante de esta variante de la innovación es que, no solo contempla el beneficio económico, sino también el beneficio ambiental y su preservación. A través de la Eco-innovación se busca lograr un eficiente y sostenible uso de los recursos naturales, disminuir los Gases de Efecto Invernadero y disminuir los residuos generados tanto en el proceso productivo como al final del ciclo de vida de un producto (Eco-Innovation Observatory, 2011).

Este tipo de innovación no solo es central a este trabajo por ser funcional a un desarrollo sostenible, sino porque también es oportunidad para América Latina. A propósito de este trabajo, es necesario tener presente la situación latinoamericana, en marco de un desarrollo sostenible.

Los países latinoamericanos enfrentan un triple desafío: si bien son los que menos han aportado históricamente a los Gases de Efecto Invernadero, son los países que más sufren actualmente el cambio climático y sufrirán en extremo en el futuro si no se cumple el Acuerdo de París; además enfrentan un desafío socioeconómico al poseer pocos recursos financieros, escasa capacidad de inversión, e incluso inestabilidad política que impide inversiones. Por último, la falta de avances tecnológicos, de inversión en Investigación y Desarrollo (I+D), y la escasa transmisión de tecnologías de los países desarrollados a los países en vías de desarrollo.

Por ello, el presente escrito se desarrolla en dos ejes: en primer lugar las definiciones más importantes y características de la Eco-innovación y, en segundo lugar, se aborda cómo y por qué la Eco-innovación es una oportunidad para la región latinoamericana.

Si te interesa leer el artículo completo, a continuación podrás leerlo en línea y descargarlo.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *