El planeta también se cuida cuando nos quedamos en casa

Por Emilia Trentacoste de Fundación TierraVida.

La cuarentena ha generado importantes impactos en el ambiente en todo el mundo. A nivel industrial, se han reducido los niveles de emisión de CO2 y otros contaminantes atmosféricos, mejorando la calidad del aire. Pero, por el confinamiento, las familias se ven obligadas a pasar más tiempo en sus casas del que pasaban usualmente. La pregunta es, ¿qué efectos ambientales está provocando el confinamiento a nivel hogar?

El consumo de energía en nuestros hogares.

El aumento del tiempo de ocio, como también la modalidad de estudio y trabajo en forma virtual, hacen que consumamos más energía de la que consumimos usualmente. Descargando las baterías de celulares y computadoras portátiles con mayor frecuencia y siendo necesario recargarlos constantemente. Además, pasamos más tiempo en cada una de las habitaciones de nuestras casas, usando permanentemente todos los artefactos electrónicos y manteniendo las bombillas de luz prendidas.

Es necesario tomar conciencia del impacto que pueden generar todas estas acciones y ayudar a disminuir el consumo energético. Para colaborar, podemos seguir una serie de consejos que permiten compensar el consumo de energía antes mencionado. Son consejos muy sencillos que, con el tiempo, deberán volverse un hábito.

Lavar la ropa con agua fría, evitando que la lavadora use energía en calentar el agua. Y una vez lavada la ropa, tenderla en espacios abiertos o cerca de las ventanas para su secado.

Aprovechar la luz natural, evitando tener las bombillas de luz prendidas constantemente.

Apagar la luz cada vez que se abandona un espacio de la casa.

El horno eléctrico consume 1225 Wh, por lo que se recomienda utilizar el microondas para calentar la comida, el cual consume solo 640 Wh.

Cuando comience la época invernal, es necesario prender estufas eléctricas únicamente en el espacio que se esté utilizando, y cerrar las puertas del ambiente para poder mantener el calor en ese espacio.

Utilizar lavavajillas sólo cuando se encuentre lleno.

Mantener los radiadores en una temperatura entre 20-21 ºC, evitando gastos innecesarios y disminuyendo el consumo energético.

El consumo de agua

En una casa en la cual vive una familia promedio de cuatro personas, es necesario que cada uno de ellos lave sus manos por 40 segundos un mínimo de diez veces al día, considerando que es recomendable hacerlo antes y después de realizar ciertas actividades, como comer o ir al baño, según la OMS. Además, cada uno de los integrantes se ducha una vez al día y lavan sus dientes tres veces por día, se lavan los platos en lavavajilla una vez al día, se riega el pasto de un pequeño patio trasero de 2 m2 de césped y se lava la ropa en lavarropas automático una vez cada dos días. Todo esto representa el consumo básico de agua de esta familia, y probablemente, el de todas.

El total de agua consumida solo en estas tareas indispensables y básicas corresponde a un valor de entre 700 a 900 litros de agua por día. Hay que considerar que no se está teniendo en cuenta el agua utilizada para cocinar ni para beber.

Es muy importante entonces, ayudar a reducir este consumo, abriendo el agua del grifo solo para mojarse las manos antes de enjabonarse y, luego, para enjuagarse. También, reduciendo el tiempo de ducha a menos de diez minutos. Se debe cerrar el grifo mientras nos cepillamos los dientes. Y es recomendable usar el lavavajillas únicamente cuando esté lleno o lavar la vajilla a mano, solamente abriendo el grifo para humedecer y para enjuagar la vajilla.

No debemos olvidar nunca que el desarrollo de nuestras acciones genera impactos ambientales, incluso cuando nos quedamos en casa. Seamos responsables y no olvidemos al planeta.

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